Las manos pueden acalambrarse por una variedad de razones, como la compresión de un nervio, la tensión muscular o los niveles anormales de minerales en el cuerpo.
Causas del acalambramiento en las manos
- Compresión de un nervio: Puede deberse a una hernia discal, artrosis, o a una postura incorrecta.
- Tensión muscular: Puede ser resultado de hacer ejercicio, esforzarse mucho, o de mantener una mala postura por mucho tiempo.
- Niveles anormales de minerales: Puede deberse a un déficit de vitaminas del grupo B, como la B12 o el ácido fólico.
- Enfermedades que afectan los nervios: Como la diabetes, la esclerosis múltiple, la artritis, la gota, o la amiloidosis.
- Trastornos cerebrales: Como el mal de Parkinson, la enfermedad de Huntington, o la distonía.
Es importante consultar a un médico si los síntomas de hormigueo o adormecimiento en las manos se prolongan en el tiempo.